miércoles, 5 de enero de 2011

Escuchas en la oscuridad

En lo más profundo de tu ser

Una voz tentadora y misteriosa,

Un fuego que t impulsa a cambiar.


La sigues a ciegas, sin temor,

La acoges con ternura y pasión,

Sin ninguna duda que te agobie,

O razón para no continuar.


Llegas a sentir algo cálido,

Que te llena y que en segundos,

Va inundando todo tu cuerpo,

Pero no sabes lo qué es.


Y en diminuto momento,

En un lapso de silencio,

Esa voz se calla repentinamente,

Y concluyes:


Que si lo ignoras,

No querrás continuar más,

Y si lo tomas quizás

Tu vida se transforme.


Por eso sigues firme con tu meta,

Y continúas por ese camino oscuro,

Que aunque abunde la penumbra ,

Sabes que no estás solo,

Sientes esa presencia dentro de ti .


Prosigues seguro y con ganas,

Hasta observar un rayo de luz,

Y encuentras la causa de ese fulgor,

Que poco a poco lleno tu mente.


Por fin encuentras la razón,

De ese cambio que te lleno,

De alegría, felicidad y muchas,

Otras emociones.


Sospechas sin seguridad,

Que es la razón de tu vida,

Y duermes plácidamente.


Con la calma que jamás,

En toda tu vida tuviste,

Pero que nació de una,

Duda tenaz.


Aprendiste a distinguir,

El bien del mal, y a llenar,

Ese pequeño vacio,

Que abrumaba Tu alma.


Y desde ese día no estás solo,

Esa voz esta siempre contigo,

Te sigue ayudando a cambiar,

Y a brindar cada vez, más felicidad.


Al mundo que te rodea,

A la sociedad con la que convives,

Porque esa es la meta de un cambio,

Cambiar, para ayudar a los demás!.


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